Para muchas personas en Argentina con ciudadanía o ascendencia italiana, la jubilación italiana sin aportes en Italia representa una oportunidad concreta de acceder a una pensión; incluso, sin haber trabajado formalmente en ese país.
Gracias a convenios internacionales y programas del Estado italiano, existen mecanismos que permiten acceder a beneficios previsionales aún si no se realizaron aportes al sistema de pensiones italiano durante la vida laboral.
En esta nota te explicamos cómo funciona, qué requisitos hay que cumplir y cómo iniciar el trámite desde Argentina.
¿Qué es la jubilación italiana sin aportes?
La jubilación italiana sin aportes es un beneficio previsional destinado a personas que no han contribuido al sistema previsional italiano (INPS), ya sea por haber trabajado en el extranjero o no haber desarrollado una actividad laboral formal.
Este tipo de jubilación italiana se conoce como “pensione sociale” o “assegno sociale” y está orientada a ciudadanos italianos o personas con nacionalidad reconocida que cumplan con ciertos requisitos de edad, residencia y situación económica.
¿Quiénes pueden acceder a la jubilación sin aportes en Italia?
Para solicitar este tipo de jubilación italiana, es necesario:
- Tener al menos 65 años de edad.
- Ser ciudadano italiano o tener la ciudadanía reconocida.
- Residir de forma legal y permanente en Italia (mínimo 10 años de residencia continua).
- Tener ingresos anuales por debajo del umbral establecido por el INPS. Este último punto es esencial, ya que se trata de una prestación no contributiva basada en la necesidad económica.
¿Qué es la jubilación mínima italiana?
La jubilación mínima italiana es un monto base establecido por el Estado que garantiza un ingreso mensual a quienes no alcanzan los aportes requeridos para una pensión contributiva completa.
Aunque el monto es reducido, funciona como un ingreso de subsistencia para personas mayores con bajos recursos. En 2025, el valor ronda los €600 mensuales, aunque puede variar según el caso.
Cómo influyen los acuerdos entre Argentina e Italia
Una de las ventajas para los argentinos con ciudadanía italiana es que ambos países tienen un acuerdo bilateral de seguridad social. Este convenio permite que los años trabajados en Argentina puedan ser tenidos en cuenta para completar los requisitos de jubilación en Italia.
Esto aplica para pensiones contributivas y para acceder a jubilaciones y pensiones italianas sin aportes directos en Italia.
¿Cómo validar los aportes hechos en Argentina?
Para que los años trabajados en Argentina sean reconocidos por Italia, es necesario realizar un trámite de validación a través de la ANSES (Argentina) y el INPS (Italia).
Esto son los pasos básicos:
- Solicitar en ANSES el historial de aportes laborales.
- Presentar en INPS los certificados emitidos por Argentina, traducidos al italiano y legalizados.
- Esperar la confirmación del INPS y la integración de los años válidos en el sistema italiano.
Esto no garantiza una pensión completa, pero puede permitir acceder a beneficios como la jubilación italiana mínima o la pensión por totalización.
Documentación y pasos para iniciar el trámite
Los requisitos de la jubilación italiana desde Argentina implican reunir ciertos documentos y seguir un procedimiento preciso:
- Documento de identidad argentino y pasaporte italiano vigente.
- Certificado de ciudadanía o acta de nacimiento italiana (si aplica).
- Comprobante de residencia en Italia (para quienes ya se hayan trasladado).
- Historial de trabajo emitido por ANSES.
- Formularios específicos del INPS.
El trámite puede iniciarse desde Argentina, pero para acceder al beneficio de la jubilación italiana sin aportes, es obligatorio residir en Italia.
El tiempo estimado de aprobación puede variar entre 6 y 12 meses, según cada caso.
Otros beneficios para jubilados en Italia
Aquellas personas que acceden a una pensión no contributiva en Italia o una jubilación italiana sin aportes pueden beneficiarse de:
- Cobertura médica a través del sistema sanitario público.
- Tarifas reducidas en servicios (transporte, luz, gas).
- Programas de vivienda para adultos mayores.
- Prestaciones sociales complementarias.
Estas prestaciones hacen que el sistema de jubilaciones y pensiones italianas sea atractivo para muchas personas mayores que evalúan residir en Italia en la etapa de retiro.
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