Deudas: ¿Cuáles son los distintos tipos y cómo afectan a la economía personal?

deuda

¿Cuáles son los distintos tipos de deudas que existen? ¿Se puede hablar de “deudas buenas” y “deudas malas”? Te brindamos algunos consejos para mejorar tus finanzas personales.

Una deuda es la obligación que tiene una persona de pagar o devolver una cosa, generalmente dinero. Para muchos, puede ser un tema tabú, y este debe ser analizado con inteligencia y serenidad, ya que la rapidez en las conclusiones puede llevar a grandes equivocaciones y consecuencias para las finanzas personales.

Se pueden identificar diferentes tipos de deuda, las cuales afectan de manera diversa a las personas.

Deuda ficcional

Se llama deuda “ficcional” a la deuda más perjudicial de todas: es la que se contrae para obtener bienes o servicios que están por encima de nuestras posibilidades y capacidades financieras, creando un mundo de “ficción” que no tiene correlación con los ingresos mensuales.

Deuda “hormiga”

La deuda hormiga es aquella que simula ser insignificante, tan pequeña que, a veces, ni nos acordamos de ella. Muchas veces se adquiere por no tener un presupuesto u organización establecida. Es el tipo de deuda en el que se cae cuando se pide dinero prestado a miembros de la familia, amigos, o a algún proveedor; también, cuando se solicita algún préstamo, compras con tarjeta de crédito, entre otras. Aunque por separado no representan un monto alto, al sumarlas podrían convertirse en una cantidad mayor.

Deuda de subsistencia

La deuda de subsistencia es aquella que se contrae para poder llegar a fin de mes sin ningún tipo de “lujos”. Esta se considera “imprescindible” para terminar la quincena o el mes. Es decir, cuando nos quedamos sin dinero y necesitamos pedir prestado para hacer frente a los gastos diarios: comida, transporte, etc.

Esta deuda se da más que nada en aquellas personas que ganan menos que el sueldo promedio y que generalmente tienen hijos o familiares a cargo.

Deuda de apalancamiento (inversión)

En este tipo de deuda, el dinero tomado no se utiliza para consumir sino para invertirlo en algún negocio u oportunidad. Es decir que el dinero prestado, se invierte para generar más dinero.

Se dice que cuando una persona invierte con dinero que no es propio sino de otra persona o institución se encuentra “apalancado”.

Cuando estas operaciones cumplen con el objetivo deseado, la sensación puede ser muy satisfactoria ya que se ha logrado el éxito más que nada con una idea y recursos ajenos; pero cuando la misma no sale como lo esperado, las pérdidas o consecuencias pueden ser grandes y difíciles de cubrir.

Consejos para mejorar las situaciones financieras personales

Es necesario aumentar la cultura y educación financiera para poder entender los distintos tipos de deuda y poder evitarlas (en el caso de que estas no estén controladas). Se necesita de la racionalidad y autoconsciencia para evaluar cuándo es conveniente tomar o no una deuda dependiendo de cada situación personal.

Nadie toma la decisión de embarcarse en una deuda para después no poder pagarlas y sufrir por esto, ni mucho menos terminar en el Veraz por no poder controlarlas.

Por eso es sumamente necesario aumentar la cultura financiera para comprender los distintos tipos de deuda que debemos evitar. 

Poner estos temas sobre la mesa, analizarlos y proponer distintas alternativas para cada situación tiene como fin movilizar la conciencia de aquellos que se encuentran atrapados en estas y motivarlos para encontrar la solución.

Lo más leído

Te recomendamos

Te puede interesar