Entre marzo y agosto de este año, la tasa de empleo en Uruguay descendió 4 puntos porcentuales, pasando del 57,4% al 57%. En términos de puestos de trabajo, esto significa una pérdida de casi 7 mil empleos. Al mismo tiempo, los subsidios por desempleo alcanzaron su máximo nivel desde octubre de 2021, llegando al 13%.
Un crecimiento asimétrico
Cuando analizamos el primer semestre de este año, se percibió un aumento del 2% de ocupados respecto al primer semestre de 2019. Esto significa un crecimiento de unos 30 mil puestos. Sin embargo, este crecimiento fue desparejo entre los distintos sectores.
Durante el primer semestre de este año, las actividades profesionales, la administración pública, la enseñanza, la salud y la información y la comunicación crearon 55 mil nuevos puestos de trabajo.
Sin embargo, en el mismo periodo, en los sectores de servicio doméstico, alojamiento y entretenimiento y la construcción informal, se perdieron 38 mil.
Esto grafica como la mejora de la tasa de empleo benefició principalmente a los sectores con mayores niveles relativos de capacitación e ingresos.
¿Cómo afecta esto a los niveles de pobreza?
Los niveles de pobreza se mantienen en niveles similares que durante 2021, pero como en muchos países de América Latina, crecieron desde la pandemia. Además, en parte, esto se explica dado el crecimiento asimétrico del mercado laboral que mencionamos previamente.
Es decir, que, en términos generales, los nuevos puestos de trabajo no beneficiaron a quienes se encuentran por debajo de la línea de la pobreza.
Los sectores de servicio doméstico, alojamiento y entretenimiento, y la construcción informal tienen, a su vez, niveles de informalidad y subempleo que duplican la media, e ingresos hasta un 50% inferiores.
La “causa argentina”
Uno de los motivos que explican esta situación es la crisis que vive Argentina ya que esto genera que el balance comercial entre ambos países sea favorable para el país vecino.
Durante el segundo trimestre, los uruguayos llegaron a gastar alrededor de USD$ 25 millones más en Argentina que los argentinos en Uruguay, convirtiéndose en el peor saldo de los últimos ocho años. Además, estos números no tienen en cuenta la incidencia del contrabando en el comercio formal.
Es importante tener en cuenta que esta situación se mantendrá igual durante el futuro próximo, ya que Argentina se encuentra lejos de resolver su crisis socioeconómica.
Es decir, se espera que durante los próximos meses, para los uruguayos siga siendo más barato comprar en Argentina que en Uruguay, reforzando el déficit en la balanza comercial de ambos países.
¿Cómo se espera que termine el año?
Si se mantiene la tendencia actual, habrá un leve aumento de ocupados respecto a 2021; si esto sucediera, se estima que el número aumentaría en unos 35 mil nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, como mencionamos antes, esta tendencia parecería favorecer a los sectores con mayores ingresos.
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