Al considerar que Uruguay tiene una de las cargas horarias más altas de la región, parlamentarios del Frente Amplio (FA) presentaron un proyecto para reducir la jornada laboral.
El debate ya empezó a darse en otros países de latinoamérica, como Colombia, Brasil y Chile. En el caso de Uruguay, este busca que la jornada se reduzca de 48 a 40 horas por semana, sin una disminución del salario. El Frente Amplio considera que el límite máximo semanal es muy extenso y destacaron el desafío que trae la aparición de nuevas tecnologías y la Inteligencia Artificial (IA).
En el proyecto, la oposición propone fijar el límite diario de la jornada laboral en 8 horas, con un tope de 40 por semana. Esto sería para trabajadores de todos los sectores sin una disminución del salario que se percibe actualmente, ya sea con remuneración mensual, semanal o por jornada.
La reducción de la jornada laboral se llevaría a cabo de forma gradual, por lo que pasaría de 48 a 46 horas semanales en el primer año después de aprobada la ley; de 46 a 44 en el segundo año; de 44 a 42 en el tercero; y finalmente de 42 a 40 en el cuarto. El tiempo que supere ese límite semanal será considerado como horas extras.
Què dice el gobierno de Uruguay sobre reducir la jornada laboral
Pablo Mieres, ministro de Trabajo y Seguridad Social, destacó hace un tiempo que “la posibilidad de una reducción de la jornada laboral debe aceptarse que solo será posible si se vincula directamente con un aumento de la productividad. Debe definirse con especificidad frente a cada sector de actividad o incluso a cada empresa”. Además, dijo que “los tiempos de trabajo, su flexibilidad y transformación no pueden representar una pérdida de derechos”.
Por su parte, el presidente de Uruguay, Lacalle Pou, dio el visto bueno para un debate acerca de reducir la jornada laboral.